martes

Cicloturista de Almazán



Tras las rutillas por Ezcaray y el Valle de Oja, y el Test Campagnolo de Urrez, parecía difícil mantener ese nivel en el tercer día de nuestro tríptico de rutas.

Pues nada más lejos de la realidad, no queda otra que dar una tremenda enhorabuena a toda la organización, por hacer que esta clásica marcha tan familiar, que tanto nos gusta por ser como es, no hiciera más que sorprendernos, sin perder ni uno de los puntitos por los que siempre volvemos: Las buenas charladas, los reencuentros, las batallitas, algún que otro pique, la cervecita de después (sí, he dicho cervecita, que sois unos pesaos…). Todo esto dando una vueltecita más de tuerca, con más tramos libres para los guerreros y nutrientes abundantes para todos…









Como dice el colega Álvar, que colabora en la organización de su marcha de Lagunas de Neila, en Almazán se hizo el milagro de los panes y los peces: Unos impresionantes avituallamientos, con todo tipo de comida, como fruta, lacitos sorianos (que ricos!), tortilla de patata, torreznos, terrible… Paella para todos al regreso, sorteos, y encima una bolsa de corredor llena de regalos: Un chorizo, una morcilla, una botella de vino, una toalla, unas barritas, revistas… Impresionante!

Enhorabuena chavales!

2 comentarios:

  1. menudo lio con la cervecita,era tostada o te ponia tostado?o eran las dos cosas?..........un jaleo lo que paso con la cerveza

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  2. Felipe, con los torreznos lo tuviste más claro, no?

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