Fin de semana con las bicis de monte por los alrededores de la Laguna de Gallocanta. Estábamos en uno de los picos del año para disfrutar de este espectáculo natural, y había que aprovecharlo.
Un gran número de grullas han pasado el invierno en la laguna, y a esto se le une estos días la llegada de miles de ejemplares en su camino hacia el norte.
La víspera de nuestra llegada allí, a través del Centro de Interpretación de la Laguna de Gallocanta, pudimos ver que el censo realizado era de 55900 animales, una cifra impresionante, lo que nos hacía ver que habíamos acertado con la elección del fin de semana.
En definitiva, un espectáculo natural, frágil, que merece toda la protección posible, y que hace de esta zona un lugar mágico durante estos días. Un lugar que hay que conocer, y que me ha tenido todo el fin de semana con los pelos de punta.
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